Reprimida deprimida...

Reprimida deprimida con los ojos cerrados
va comulgando con la humedad de sus labios
se acaricia la boca, lamiéndose los dedos

extasiada con la sal sedosa de sus manos.

la culpa de acariciar sus senos la atormenta

invocando al cielo pide clemencia por su "pecado"

de meter la mano entre sus piernas

y acariciar su vientre y sus labios.

Un sueño húmedo la torturaba

entregándose a un infinito placer despertó,

luchando por controlar su agitación

y la fiebre intima que la desesperaba.

Pero que importa, si mañana por la calle la verán caminar muy temprano

tapada hasta el cuello con esa expresión piadosa

con un libro en la mano

y con entrepierna muy sedosa...

El recuerdo de ese sueño la llenaba de mil culpas

Quizás le haga falta una confesión

buscar en el rostro de sus pastores el perdón o la censura

para luego refugiarse en la oración...

pero que hacer con su cuerpo insatisfecho y con el rubor de sus mejillas

que va a pasar cuando mojada y palpitante no pueda encontrar una salida...

No hay un Salmo que la pueda ayudar, ni una historia de sacrificio y redención que la hagan olvidar aquel sueño

por mucho que invoque al señor, no va a mitigar la fiebre de sus senos.

Reprimida deprimida se va haciendo vieja entre la tortura y la enfermedad,

en la noche solo se consuela al frotarse y lamerse

patéticamente llora al descubrir su sequedad.

Poema de Mi querido amigo y  hermano Adolfo Silva...